Para hacer con los chicos, y crear un espacio casi mágico en donde las galletas van de la mesada al horno y de allí, aún tibias, acompañan la merienda o las viandas escolares
INGREDIENTES
Avellanas tostadas y peladas, 150 gr (procesadas un poco dentro de un molinillo, pero no deshechas del todo para que se sienta su sabor)
Harina de trigo 0000, 400 gr
Polvo para hornear, 1 ½ cdita
Canela, 1 cucharadita tamaño café, al ras
Manteca, 100 gr de manteca
Aceite de girasol, 50 cc
Azúcar molida, 150 gr
Huevos, 2
Clara, 1
Ralladura fina de cáscara de naranjas
Chocolate semiamargo rallado, 150 gr
PREPARACIÓN
Mezclar la harina, polvo para hornear y canela.
En otro bol batir la manteca, aceite, azúcar, los huevos, clara de huevo ralladura de naranja, harina de avellanas y chocolate rallado. Agregar la mezcla de harina y unir todo sin amasar. Si fuere necesario, agregar alguna cucharada de agua o jugo de naranjas. Dejar reposar 5 minutos.
Separar en dos partes, amasar y dar forma de cilindros.
Disponer los cilindros sobre una hoja de papel manteca separadas uno del otro y hornear unos 40 minutos.
Retirar, dejar enfriar bien y cortar rebanadas con la ayuda de un cuchillo filoso.
Regresar las rebanadas a placas limpias y hornear 15 minutos.
Retirar ya secas, dejar enfriar en una rejilla y ya frías, guardar en recipientes
Estas galletas de pan negro pertenecen a la panadería germana que sorprende por sus exquisitos panes que, con ingenio, transforman en galletas sin cambiar la receta. La panadería de este pueblo se hizo famosa por el uso de harinas integrales, no solo de trigo sino también de centeno y otros cereales. El tema es visual y ya en boca la sorpresa de pensar en un pan salado de centeno es descubrir un pan de chocolate y avellanas.