Luego de la reunión en Olivos, el gobernador Axel Kicillof explicó cómo es el avance a la fase de distanciamiento en el Área Metropolitana de Buenos Aires.
El gobernador Axel Kicillof mostró su optimismo en relación a la situación epidemiológica de la Provincia, y particularmente del Área Metropolitana de Buenos Aires, donde en las últimas 10 semanas disminuyeron paulatinamente los casos positivos de coronavirus, lo que permitió avanzar de una situación de aislamiento social, a una fase de distanciamiento social.
El Gobernador comenzó la conferencia con un agradecimiento a los 135 intendentes bonaerenses, y al presidente Alberto Ferández por conducir las riendas del país «en la situación epidemiológica y económica más complicada de todo el siglo», según calificó. Además, cuestionó a un sector de la oposición. «No quiero ni imaginarme qué hubiera sido de la pandemia en Argentina si gobernara alguno de esos del ‘sálvese quien pueda'», lanzó Kicillof.
Luego, dio paso a los anuncios. El más importante de ellos, que ayer fue anticipado por este medio, el pase de la extinta fase 3 a una etapa de distanciamiento social. «Vamos a dejar la etapa del aislamiento para pasar a la etapa del distanciamiento. Empieza la etapa de los protocolos», indicó Axel.
Las estadísticas son más que positivas, y eso se notó en el entusiasmo con el que Kicillof remarcó que en las últimas 10 semanas los casos en el AMBA cayeron de 5.300 casos por día, en el pico que fue la última semana de agosto, a 1.900 casos por día esta semana. Si bien aclaró que «todavía es un número muy grande», destacó la disminución de la curva de contagios en un tercio.
Lo mismo ocurrió con las camas de terapia intensiva. La ocupación, que llegó a rozar el 70% en promedio en el AMBA, incluso con una ocupación cercana al 100% en algunos hospitales del conurbano bonaerense, hoy es mucho menor y eso alivió la presión sobre el sistema de salud. «Esta semana, ayer, teníamos ocupadas por Covid 730 camas UTI. En el 10 de septiembre, ese mismo número había alcanzado 1.250 camas de terapia intensiva. Casi el doble», remarcó el Gobernador.
También mejoró la situación en el interior de la Provincia, que preocupaba a la administración bonaerense. Según precisó Kicillof, la curva del interior se amesetó y comenzó a disminuir. No habrá distanciamiento en todos los municipios, sólo en aquellos que tengan una situación epidemiológica favorable. Lo que sí ocurrirá en todo el territorio bonaerense, es la nueva estrategia del Gobierno, que decidió reforzar medidas de rastreo, testeo y aislamiento de casos para «aplastar la curva».
«Vamos a pasar de una política de reducir los contagios, lo que se conoce como aplanar la curva, para pasar a aplastar la curva», indicó el Gobernador. Para eso, anunció los cinco ejes que reforzarán, y que están orientados a optimizar la fase de distanciamiento para no tener que sufrir nuevos retrocesos. Una de las novedades, en ese sentido, es que comenzarán a realizar tests a personas asintomáticas que hayan tenido contacto estrecho con un paciente de Covid-19.
Con esas medidas, la Provincia intentará disminuir al mínimo los casos, y sacar provecho del factor estacional favorable para realizar actividades en espacios abiertos. Respecto a las nuevas actividades, Kicillof sostuvo que en el AMBA habrá nuevas habilitaciones. A partir de ahora se permitirá el trabajo de personal auxiliar de casas particulares en varios domicilios -hasta el momento sólo se permitía el trabajo en un sólo domicilio-; la habilitación de restaurantes y bares en el interior con aforo; las actividades deportivas colectivas de hasta 10 personas en espacios cerrados; la ampliación de la construcción privada y los gimnasios en espacios cerrados.
Respecto a la vacuna, el gran anuncio de esta semana, el Gobernador destacó el trabajo para llegar a un acuerdo que permita obtener las dosis necesarias. «Podemos decir que muy pronto vamos a tener la vacuna y empezar con un plan de vacunación, para empezar a terminar con esta pesadilla», sostuvo. La Provincia ya trabaja en un operativo de vacunación masivo, que no será obligatorio y sobre el cual se reforzará la importancia de la vacuna. En ese sentido, Kicillof se mostró molesto por los intentos de desprestigiar la vacuna rusa Sputnik V. «A quién se le ocurre que una vacuna puede tener ideología», cuestionó. Y finalizó la conferencia con un nuevo pedido de sostener el esfuerzo: «No bajemos los brazos», concluyó el Gobernador.