Desde la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMyA), explicaron cómo se construye el precio de la carne y lanzaron críticas a AFIP y ARBA.
En el marco de un sostenido aumento del precio de la carne, los matarifes y abastecedores salieron en su defensa, puntualizando sobre “presiones fiscales” que estarían “asfixiando” al sector. En especial, criticaron duramente a AFIP y a ARBA.
El comunicado de los matarifes se da un día después de que el INDEC publique los nuevos datos de inflación, respecto al mes de marzo. En el estudio, se desprende un dato clave: el precio de la carne casi duplican el nivel inflacionario en general.
Según el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) “a lo largo del año 2020 y comienzos de 2021, se observan incrementos significativos durante enero (7,6%), marzo (5,6%), abril (9,2%), noviembre (7,7%), diciembre (20,2%) y enero (6,3%)”. “Luego de la fuerte dinámica alcista, en febrero el incremento ponderado promedio de los cortes de carne vacuna anotó una fuerte desaceleración, resultando en 0,5%”, indicaron.
La contracara del tema fue manifestada por la Cámara Argentina de Matarifes y Abastecedores (CAMyA), que sacó un informe en el cual explica cómo se construye el precio de la carne y cuáles son los “errores” que cometen las agencias recaudadoras del Estado. Para los productores, AFIP “parte de una referencia errónea” al momento de calcular el pago que se realiza para la faena.
Esto –explican- se da en un contexto por demás complejo: “precios de la hacienda de consumo que se encuentran en niveles récord, una caída en las ventas de las carnicerías y consumidores que no pueden convalidar más subas de precios en los mostradores”.