Yoga toda la vida
La práctica de yoga no es específica a una etapa de la vida terrenal sino todo lo contrario, es funcional y benéfica a cada instante de nuestra existencia vital.
Existen muchos prejuicios sobre la práctica y los estilos y aún hay personas que creen que una clase consiste en sentarse en posición de Buda con ojos cerrados y piernas cruzadas hasta que el instructor o guía permita modificar la posición y regresar a las actividades cotidianas. Me atrevo a decir que este pensamiento está muy alejado de la realidad, dado que las clases son tan variadas como las ramas de esta maravillosa filosofía y cómo así también, la impronta de cada profesor.
Teniendo en cuenta mis años de alumna y mi formación constante me atrevo a confesar que mi forma de facilitar una práctica es totalmente única y amorosa adaptada a la persona que tengo frente a mí. Acompaño a personas que se acercan por primera vez al conocer que están embarazadas y es un momento excelente para conectarse con la magia de la respiración. La práctica durante la gestación favorece el fortalecimiento de los músculos de la pelvis y el abdomen, previniendo diastasis y dolores lumbares propios de los cambios del cuerpo. Colabora con la sensación de fatiga y cansancio, permite una conexión con el bebé y brinda herramientas al momento del parto.
En el puerperio favorece en la restauración del organismo colaborando a nivel emocional y físico.
Otra posibilidad es una práctica dinámica y de intensidad prometedora que flexibiliza y tonifica en simultáneo. Es conocida como Yoga Flow o Vinyasa Flow y se caracteriza por el enlace de posturas a partir de la respiración dándole tranquilidad a la mente al llevar la atención al movimiento del cuerpo.
En la edad adulta la práctica constante facilita el descanso y el desempeño de la vida cotidiana. El cuerpo se mantiene ágil y fuerte, la columna flexible y se percibe un estado de equilibrio.
El yoga se puede practicar en cualquier etapa de la vida, en cualquier momento y en cualquiera de sus estilos. Siempre sostengo en mis clases que la disciplina se adapta al alumno, toda postura se ajusta y se acerca a cada cuerpo.
A nivel espiritual y mental la disciplina nos facilita la consciencia sobre nuestro cuerpo, el estar presentes y volvernos cada vez más amorosos con nuestros procesos.
Cambia el cuerpo y la mente en simultaneo, una realidad más presente nos invade. Gratitud inmensa por este camino de vida. Te acompaño.
María Celeste yoga y conciencia
Nota: