El Gobierno aseguró que no se moverá de su incremento programado de 20% en las boletas y avanza con la idea de la segmentación. El organismo habló de una reducción “gradual” de los subsidios a la energía pero aún no se consensuaron metas. Los analistas esperan el doble de ese incremento.
La discusión sobre tarifas y subsidios ya se acomodó como uno de los temas centrales que orbitarán el acuerdo entre el Gobierno y el Fondo Monetario Internacional. El ministro de Economía Martín Guzmán insistió tras el anuncio del entendimiento técnico que no habrá cambios en la hoja de ruta que se planteó el Poder Ejecutivo para este año en la política tarifaria, pero algunos análisis privados dan cuenta de que para estabilizar el gasto público en subvenciones sería necesario un incremento en las boletas superior al 20% que estipuló en un principio la Casa Rosada.
La política de tarifas fue un elemento muy delicado en la difícil convivencia de las distintas alineaciones del Frente de Todos y generó cortocircuitos desde el principio del mandato de Alberto Fernández. Hubo momentos de evidente fractura en la coalición cuando en la mesa de discusión hubo en primer plano alguna cuestión ligada a los subsidios.